Luego de un año de pérdidas y abultados adeudos para Petróleos Mexicanos
(Pemex), en 2025 la petrolera estatal podría enfrentar grandes presiones
financieras, advirtió HR Ratings. En un análisis reciente, la calificadora
consideró que las presiones podrían darse por los resultados reportados por
Pemex (HR BBB+ con Perspectiva Negativa) para el ejercicio fiscal de 2024, en
particular por un EBITDA de 248,000.5 millones de pesos, una disminución del
34.3% en comparación con 2023. El debilitamiento en esta métrica sugiere que en
los próximos trimestres la petrolera podría reducir sus niveles de inversión,
incrementar su dependencia al apoyo gubernamental mediante menores cargas
impositivas o transferencias adicionales, o bien, disminuir la amortización
neta de su deuda. HR Ratings añade que si se buscara incrementar el flujo
operativo mediante reducciones en las inversiones, esto podría agravar la
problemática de Pemex si se traduce en una caída continua en la extracción y
exportación de crudo. Dentro de los ingresos de Pemex, las ventas de
exportación sufrieron una disminución de 9.1%, principalmente debido a la caída
del 17.9% en las exportaciones de crudo y condensados, aunque las ventas en el
exterior de petrolíferos aumentaron 5%. Dicha caída se explicó por una
reducción del 22% en el volumen de crudo exportado. En contraste, el precio de
la mezcla mexicana de petróleo se mantuvo relativamente estable, con un
promedio de 70 dólares por barril en 2024, frente a los 71 dólares por barril
en 2023. HR Ratings atribuye la reducción en las exportaciones de crudo a tres
factores: el primero se relaciona a una menor demanda por la mezcla mexicana en
el mercado internacional. Además de la caída del 6.5% en la producción de crudo
y la decisión de destinar un mayor volumen de petróleo al consumo y
procesamiento doméstico para satisfacer la demanda interna.