Las exportaciones de China crecieron a un ritmo más lento en noviembre que el excelente mes anterior, mientras que las importaciones se contrajeron inesperadamente, en una señal preocupante para la economía número 2 del mundo. Las exportaciones de China crecieron a un ritmo más lento en noviembre que el excelente mes anterior, mientras que las importaciones se contrajeron inesperadamente, en una señal preocupante para la economía número 2 del mundo, con la amenaza adicional de los riesgos comerciales que supone el inminente regreso de Donald Trump. El presidente electo de Estados Unidos, Trump, ha prometido imponer un arancel adicional del 10% a los productos chinos en un intento de obligar a Pekín a hacer más para detener el tráfico de productos químicos utilizados para fabricar fentanilo. Los envíos al exterior crecieron solo un 6.7% el mes pasado, según mostraron el martes los datos de aduanas, por debajo del aumento del 8.5% previsto en una encuesta de Reuters entre economistas y de la subida del 12.7% registrada en octubre. Y lo que es más preocupante, las importaciones se contrajeron un 3.9%, su peor resultado en nueve meses, y echaron por tierra las expectativas de un aumento del 0.3%, manteniendo vivas las peticiones de más medidas de ayuda económica para apuntalar la demanda interna.